“PERDER LA ESPERANZA EN LA HUMANIDAD”
Esta expresión se repite constantemente y siempre me produce un sentimiento de mezcolanza, entre pena e impotencia, al percibir la enraizada confusión en la que, personas de todo perfil cultural y ámbito social, se encuentran al manifestarse de esta forma.
Porque cuando alguien dice haber perdido la esperanza en la humanidad, lo más grave es que está confundiéndose en lo más esencial, en el hecho de que el animal que biológicamente somos y el ser social que hemos alcanzado a ser, no hemos concluido con el “proyecto pretendido de ser Seres Humanos”; por lo menos, no de forma global y homogénea, como si ello fuera una etapa superada de nuestra evolución.
Ni mucho menos; más bien al contrario, este animal que si somos y el ser social que cada un@ hemos alcanzado ser, dirigidos y conducidos por la minoría de homo sapiens sapiens más exitosa de cada momento en nuestra evolución biológica y social, hasta hoy, conforme a los intereses más evidentes y a los menos confesables de esta minoría dominante y gobernante, de hecho estamos abandonando el proyecto de Ser Humano, en favor de una suerte de futuro de “constante felicidad biónica” en el que en una virtual o semi-real ciber-realidad, la inteligencia artificial, el análisis de datos y los algoritmos correspondientes en infinita evolución, ya sin CONCIENCIA ni Alma a esta asociada en su dimensión metafísica despreciada por la ciencia y los científicos, harán del animal biológico que si somos y del ser social que habremos decidido ser, un “feliz ente bio-tecnológico”.
Un ente, ya deshumanizado, capaz de vivir eternamente según los promotores de estos escenarios de futuro, sin necesidad de sufrir para aprender, incluso “sin necesidad de sentir para ser feliz”.
Aunque, de acuerdo con la opinión de HOM@ CONSCIENCE, es también la mía que ese escenario de futuro eterno, deshumanizado y sin alma, dado que es un futuro SIN CONCIENCIA -la cual es una potencia del Ser Humano ya abandonado, no asequible por otra parte para la dominante minoría tecno-cientificista, egocéntrica y explotadora de la GRAN MAYORIA-, más bien sigue siendo huida, o carrera sin conciencia ni auténtica o verdadera razón de ser, en la dirección de los intereses y el beneficio morboso de la referida minoría dominante, aunque, para la GRAN MAYORÍA conformada o sometida, tan solo será un nuevo “camino sin retorno” del que, si se puede, habrá que volver.
Desandar otro camino sin salida, posiblemente, a partir de haber llegado a una situación ya “sin futuro real”, como ahora estamos obligados a hacer, al tener que volver a una realidad en la que los combustibles fósiles no son ni sostenibles, ni saludables para la sociedad y el planeta, aunque en su día también los vendieran como el futuro de “felicidad y bienestar para tod@s”.
Mentiras interesadas y estafas sistémicas en un marco repetido de codicia sin límite de la minoría dominante contra LA GRAN MAYORIA.
Más que futuro de eterna felicidad, una nueva y más sofisticada forma de explotación del animal que si somos y del ser social, ya deshumanizado y definitivamente cosificado, que cada un@ PRETENDEMOS SER.
¡BE CONSCIENCE!
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